Animar a leer

El objeto de este bloque es esbozar el contexto en el que se han de desarrollar los programas y actividades de promoción de la lectura, destacar la importancia de la planificación y hacer hincapié en la idea de proceso que ha de guiar este trabajo. Respecto a las técnicas y herramientas que pueden utilizarse como apoyo y base de las dinámicas a seguir, insistimos en la necesidad de determinar su correcto uso, advirtiendo acerca del peligro de que puedan cobrar de por sí un protagonismo que, como medios y no fines en sí mismas, nunca se les debe otorgar.

Bajo este punto de vista se ofrece un amplio abanico de actividades que pretende servir de orientación para el desarrollo de programas de promoción de la lectura desde la biblioteca escolar.

1. La lectura en la sociedad de hoy

Contrariamente a lo que puede suponerse, la lectura es hoy esencial e imprescindible. El ejercicio de la lectura determina no sólo el acceso a los bienes culturales sino también el normal desenvolvimiento del individuo en su que hacer cotidiano y el uso pleno de sus derechos sociales, políticos o como consumidor. Hoy más que nunca es necesario estar preparado para poder asimilar la cantidad de mensajes que a diario se reciben, ser capaz de comprenderlos y analizarlos y poder dar una respuesta crítica.

Paradójicamente, cuando la sociedad ha alcanzado sus más altas cotas de alfabetización, gran número de personas engrosan la bolsa del analfabetismo funcional, es decir, saben leer pero no practican la lectura o lo hacen de un modo parcial y tienen graves carencias en la comprensión de los textos.

Por otra parte, estas deficiencias de comprensión y la utilización de la lectura como una simple técnica de desciframiento, son la base del fenómeno del fracaso escolar y alimentan el crecimiento de nuevos grupos de marginación social.

La escuela tiene un gran aliado en la biblioteca escolar como proyecto común del centro educativo, para responder a las necesidades que sobre la lectura tiene el individuo, poniendo a los alumnos en múltiples situaciones de lectura, donde leer no se limite al mero aprendizaje de unas técnicas de desciframiento.

1.1. ¿Para qué leer?

El verdadero sentido del trabajo de promoción de la lectura en la biblioteca escolar consiste en dar respuesta a esta pregunta, en dar sentido al esfuerzo del alumnado en su proceso de aprendizaje de la lectura y en posibilitar el salto cualitativo desde el saber leer, garantizado por una educación de base, hacia el querer leer.  

Esta perspectiva confiere al trabajo de estimulación del hábito de la lectura una idea de proceso que ha de iniciarse en las edades más tempranas, y en el que deben estar comprometidas la familia, la escuela y la biblioteca.

En este proceso, íntimamente ligado al desarrollo afectivo, intelectual y social del niño, el libro le aporta información sobre el entorno y sobre sí mismo, debiendo procurar que la lectura esté en estrecho contacto con su experiencia vital. Leer es hoy un acto complejo y que no se limita sólo al libro; hay que capacitar al lector para que sepa interpretar y ser crítico con todos los mensajes, sean del tipo que sean .

Indudablemente hoy se lee más y hay más necesidad de leer, pero también existe mayor peligro de sucumbir ante tantos estímulos . Hoy más que nunca se necesitan lectores críticos, capaces de discriminar y seleccionar. El papel de la biblioteca escolar debe ser entonces despertar y cultivar el deseo y el gusto por la lectura, contrarrestando y compensando las desigualdades de acceso al libro y a la información.

1.2. ¿De dónde partir?

Teniendo en cuenta especialmente la lectura recreativa, de ocio o literaria, es importante resaltar dos premisas de las que partir y que deben presidir la labor de promoción de la lectura:

"El verbo leer no soporta el imperativo. Aversión que comparte con otros verbos: el verbo "amar" el verbo "soñar"... Claro que siempre se puede intentar. Adelante: "¡Ámame!" "¡Sueña!" "¡Lee!" "¡Lee! ¡Pero lee de una vez, te ordeno que leas, caramba!"  
- ¡Sube a tu cuarto y lee! ¿Resultado? Ninguno.  Se ha dormido sobre el libro. La ventana, de repente, se le ha antojado inmensamente abierta sobre algo deseable.
Y es por ahí por donde ha huido para escapar al libro, pero es un sueño vigilante: el libro sigue abierto delante de él.
Por poco que abramos la puerta de su habitación le encontraremos sentado ante su mesa, formalmente ocupado en leer.
Aunque hayamos subido a hurtadillas, desde la superficie de su sueño nos habrá oído llegar
. ¿Qué, te gusta?
 No nos dirá que no, sería un delito de lesa majestad. El libro es sagrado, ¿cómo es posible que a uno no le guste leer? No, nos dirá que las descripciones son demasiado largas."1

"Gratuito. Así es como él lo entendía. Un regalo. Un momento fuera de los momentos. Incondicional. La historia nocturna le liberaba del peso del día. Soltaba sus amarras. Se iba con el viento, inmensamente aligerado, y el viento era nuestra voz. Como precio de este viaje, no se le pedía nada, ni un céntimo, no se le exigía la menor contrapartida. Ni siquiera era un premio. (¡Ah, los premios..., los premios había que ganárselos!) Aquí, todo ocurría en el país de la gratuidad.  La gratuidad, que es la única moneda del arte."2

Desde este punto de vista, la lectura no ha de estar marcada con el estigma de la obligación, ni contrapuesta a otras actividades y esferas del ocio. El libro se ha de situar dentro de un conjunto de opciones, en estrecha relación con otras expresiones y manifestaciones culturales.

Aparentemente, las premisas formuladas pueden verse en contradicción con la labor académica del centro educativo, con la necesidad de transmitir al alumno unos conocimientos y la obligación de cumplir un programa, pero nada más falso y artificial. Asumir la opción de libertad de acceso al libro y respetar la gratuidad de la lectura no despoja ni empobrece las competencias académicas de la escuela respecto a la lectura, más bien las enriquece y favorece una relación más firme y sólida entre el lector y el libro.

La biblioteca escolar aporta el equilibrio necesario entre intereses que aparentemente pueden verse en pugna, ofreciendo una variada colección, así como espacios y momentos que aseguren el respeto al proceso lector de cada uno de los niños que se inician en la lectura.

1.3. Prejuicios y actitudes frente a la lectura

La labor de la biblioteca escolar, en coordinación con el conjunto de la comunidad educativa, ha de hacer frente también a una serie de prejuicios y de actitudes negativas hacia el libro y la lectura muy extendidos entre el alumnado:

A estas actitudes se suman otras barreras que hay que vencer y compensar, como las malas experiencias y la falta de autoestima de los niños que se sienten rechazados por el libro o la falta de estímulo en el entorno familiar, obstáculos que han de ser salvados para poder despertar en cada uno de los alumnos el gusto y el placer de leer, en primer lugar, para uno mismo.  

En muchos casos padres y docentes actúan también de freno, primando la lectura como fuente de conocimientos frente a la lectura personal y provocando así una actitud negativa hacia ella.

2. ¿Cómo entender la animación a la lectura?

La dinamización de la biblioteca escolar comprende la planificación y desarrollo de programas y actividades de promoción de la lectura que intenten despertar en cada niño deseos de leer, capacitarles para abordar todo tipo de textos: informativos, científicos, literarios, etc. y les permita el poder encarar múltiples situaciones de lectura:

En definitiva, se trata de crear las bases para asentar un sólido hábito de lectura. Los términos asociados al concepto de animación a la lectura que se repiten con mayor frecuencia en los artículos que tratan el tema, identifican Animar con:

Animación a la lectura

El listado precedente aporta una interesante y clara radiografía del concepto que implica el verbo animar. El conjunto de verbos utilizados denota un eminente carácter activo, que en principio se dirige al niño en forma de estímulos externos (vg. mostrar, estimular) y que busca, en segundo término, la propia respuesta activa de éste (vg. crear, compartir). Del conjunto de términos presentados se desprende también otro aspecto fundamental en la labor de promoción de la lectura: la idea de proceso.

Animar es algo más que desarrollar simples estrategias con los libros y en absoluto se puede limitar a un conjunto de acciones aisladas. Se trata de descubrir con los alumnos la sensibilidad literaria, de cultivar el gusto y el placer de leer. Esta meta solo se conseguirá a través de un proceso gradual y continuado que se inicia con un primer encuentro, un primer contacto entre el lenguaje, el libro y el niño, que ha de procurarse sea positivo y que se ha de iniciar en edades tempranas.

Este primer encuentro determinará en gran medida el resto de la andadura. Seguirá luego una segunda fase marcada por propuestas creativas en torno al libro y las palabras, que ponen en contacto la lectura con otras formas de expresión: escritura, plástica, oralidad, teatro, imagen, etc., donde se muestra, estimula, y provoca...

Todo ello gira en torno a un núcleo central definido por la creación de situaciones de comunicación:

"Si queremos que nuestros niños lean, y que lean de verdad buenos libros, es preciso comenzar por nosotros mismos, dándonos el tiempo de leer.

Es necesario que nuestro placer al leer se manifieste en nuestros actos, en nuestra vida. Si los niños nos oyen hablar de tal o cual libro que nos ha gustado, y si ese placer es real y en cierta manera tangible, está fuera de dudas que el niño nos imitará y se pondrá a leer.  El camino más corto entre el niño y el libro pasa por la expresión, por su expresión. Debemos pues, animar al niño a expresarse, valorar sus esfuerzos por hablar, ponerle en situaciones de comunicación."3
Este proceso, que parte del descubrimiento de las letras, del juego con el lenguaje y que pasa por la socialización de la lectura, tiene que concluir en el asentamiento de la relación íntima y personal entre el niño y el libro, relación que la biblioteca tiene la obligación de apoyar y enriquecer.

Volviendo a la relación de partida, existen una serie de términos ligados a la animación que refuerzan esta idea de continuidad y que los bibliotecarios escolares han de tener muy presentes, tanto en su ánimo de iniciar en la lectura a aquellos alumnos que nunca han leído como en su labor de profundización y enriquecimiento del hábito lector de los que ya han emprendido el camino.

Dicha labor de continuidad tiene que ir acompañada por una actitud que busque acompañar, alimentar, sustentar, alentar, mantener...

"Es, en un principio, el buen lector que seguiría siendo si los adultos que lo rodean alimentaran su entusiasmo en lugar de poner a prueba su competencia, si estimularan su deseo de aprender en lugar de imponerle el deber de recitar, si le acompañaran en su esfuerzo sin contentarse con esperarle a la vuelta de la esquina, si consintieran en perder tardes en lugar de intentar ganar tiempo, si hicieran vibrar el presente sin blandir la amenaza del futuro, si se negaran a convertir en dura tarea lo que era un placer, si alimentaran este placer hasta que se transmutara en deber, si sustentaran este deber en la gratuidad de cualquier aprendizaje cultural, y recuperaran ellos mismos el placer de esta gratuidad."4

Verbos claves para animar una biblioteca escolar
 
El conjunto de términos presentado y el cuadro precedente completa la relación de elementos básicos que deben tenerse en cuenta, que no han de faltar en una propuesta dinámica y creativa:

3. ¿Cómo animar a leer?:

La labor de animación a la lectura en la biblioteca escolar consistirá, pues, en un conjunto de acciones tendentes a favorecer el acercamiento del alumnado a los libros y asegurar su crecimiento lector. Es importante que estas acciones se inserten en un proyecto de lectura asumido y apoyado por toda la comunidad escolar y que respondan a un proceso de planificación y revisión periódica.

A modo de ilustración se presentan a continuación los elementos que deben tenerse en cuenta a la hora de elaborar un programa de promoción de la lectura desde la biblioteca escolar. Este programa deberá estar recogido en el Proyecto Educativo del Centro para garantizar la continuidad del mismo.

Bases para el diseño del programa de lectura

Los cuatro bloques que siguen pretenden mostrar un amplio abanico de posibilidades de acción de la biblioteca escolar en su labor de promoción de la lectura.Es difícil ofrecer una clasificación de las actividades de animación a la lectura puesto que están interrelacionadas y habitualmente no se dan de manera aislada, sino que aparecen mezcladas según el tipo de trabajo que se realice y el carácter de la programación en la que se incluyan.

Se ha optado por agruparlas en torno a cuatro núcleos para facilitar su presentación:

3.1.- Animar a leer desde el libro.

3.2.- Animar a leer desde la escritura.

3.3.- Animar a leer desde la oralidad.

3.4.- Animar a leer desde otros medios.  

 

3.1. Animar a leer desde el libro:

El libro ocupa un lugar protagonista en la biblioteca escolar aunque comparta su espacio con otros soportes lectores. La colección de libros debe configurarse a partir de una buena selección de títulos, tanto de ficción como informativos, temas y autores, analizando previamente las necesidades e intereses del centro escolar.

Sin embargo, una biblioteca bien organizada y estructurada, con una colección excelente, no garantiza el aprovechamiento de sus fondos por parte de los alumnos.

Es necesario favorecer el acercamiento entre libros y lectores, descubrirles las posibilidades de utilización de los diferentes modos de lectura. Por eso, con una responsabilidad pedagógica mayor que la de otras bibliotecas (públicas, municipales, etc.), la biblioteca escolar debe dinamizar estos fondos a partir de diversas acciones dirigidas a captar usuarios y formarlos como lectores.

Se trata de favorecer en los alumnos el desarrollo de sus competencias como "lectores polivalentes", es decir, formar lectores que no sean meros consumidores de libros, sino sujetos capaces de variar sus modos de lectura de acuerdo a sus intereses y necesidades. Es importante que desde sus primeros años los niños y niñas tengan, antes incluso de aprender a leer, la oportunidad de establecer una relación afectiva con los cuentos. Esta relación se inicia con la narración oral y la lectura en voz alta. Más tarde, es necesario favorecer un encuentro más personal con el libro en el que el lector descubre sus gustos y desarrolla habilidades en relación con los textos.

Este proceso complejo no se consigue de forma espontánea sino que precisa de adultos mediadores que ayuden a los niños y jóvenes a desarrollar una práctica reflexiva de la lectura y a descubrir sus "recompensas"5:

"Si está escrito por un verdadero entusiasta, un libro permitirá al lector comprender por qué hay gente dedicada al estudio del leopardo, del DNA, del traje victoriano, de las plantas alpinas o de cualquier cosa.
Si está escrito por un autor perspicaz y preocupado, un cuento o una novela permitirán al lector que no sólo comprenda sino que simpatice con las personas que son diferentes o que se encuentran en situaciones o circunstancias distintas.
El lector siente como si fuera miembro de un grupo minoritario, como si viviera en tiempo de guerra o como si fuera disminuido, como si estuviese enamorado sin esperanza o como si estuviese intimidado en la escuela."

La biblioteca escolar, espacio "democratizador" por excelencia, es el lugar ideal para desarrollar y enriquecer el camino lector de todos los escolares. La literatura infantil y juvenil ofrece unas posibilidades muy favorables en el desarrollo de esta afición pues tiene en cuenta los intereses de los niños y jóvenes de hoy, así como sus capacidades para acceder a los textos, según las diferentes edades.  

Así, las actividades que se plantean en este apartado se ofrecen como propuestas para ser llevadas a cabo en la biblioteca del centro y establecer ese contacto básico y necesario de los lectores con los libros. 

PARTIR DE...
PARA...
Una oferta variada de libros (géneros, autores, temas...).
Que todos los alumnos descubran posibilidades de lectura.
La libertad de elección de lecturas.
Favorecer el criterio propio en la elección y definir sus gustos particulares.
El respeto de los ritmos de lectura.
Evitar fracasos e integrar a todo tipo de lectores.
La presencia constante de los libros en las actividades de animación.
Garantizar los objetivos de la animación. 
Englobar las propuestas de actividad dentro de un proyecto lector.
Implicar en la tarea de lectura a toda la comunidad educativa

No se trata, por tanto, de organizar actividades espectaculares sino de establecer verdaderos proyectos bien planificados que ayuden a los niños y jóvenes a desarrollar destrezas y aficiones lectoras.

Presentación de libros:

La actividad plantea un contacto real entre los libros y los lectores dentro del espacio de la biblioteca. Dar a conocer una amplia variedad de libros a los alumnos supone ayudarles a descubrir que hay posibilidades para todos los gustos e intereses.

Por otra parte, en muchos casos esta actividad despierta en los niños y niñas la curiosidad por conocer temas nuevos.  Perfectamente ordenados en las estanterías, los libros pueden convertirse en objetos anónimos que no llaman la atención de los posibles lectores.

Cuando los alumnos acuden a al biblioteca del Centro se encuentran perdidos ante montones de volúmenes que no tienen significación para ellos. Por eso, la presentación de algunos libros a partir de la explicación sobre los contenidos hace que el lector encuentre razones para leerlos o para rechazarlos en favor de otro más interesante para él.

Así, los libros adquieren un sentido a través de la descripción de sus rasgos y características. La persona que realiza esta exposición debe contagiar a los alumnos su entusiasmo por las lecturas seleccionadas.


La forma de presentar los libros debe ser divertida y atractiva. De este modo los niños sabrán que se trata de propuestas de ocio y entretenimiento. Algunos ejemplos de presentación de libros son:
En cualquier caso debemos tener en cuenta qué objetivos queremos conseguir con estas presentaciones y seguir el siguiente proceso:
  
Fases del proceso de presentación de libros
1. Seleccionar libros. Explicar los criterios utilizados para la selección.
  • Novedades de la biblioteca. 
  • Un autor de moda. 
  • Un autor de calidad poco conocido. 
  • Tema de interés en la escuela o en el grupo.
2. Leer los libros seleccionados.
  • Fijarse en contenidos destacables y establecer relaciones con otros libros.
3. Presentar los libros a los alumnos.
  • Hablar del autor, el género, tema, tipo de texto, etc... 
  • Leer en voz alta un párrafo interesante e interrumpir la lectura en un momento de suspense. 
  • Hacer comentarios divertidos sobre personajes y acciones.
4. Permitir un contacto personal de los niños y jóvenes con los libros.
  • Expositor en la biblioteca con los libros presentados. 
  • Listado de libros con reseña para entregar a los alumnos. 
  • Cartel con las portadas fotocopiadas en la pared de la biblioteca.
5. Posteriormente a la lectura: pedir opinión sobre los libros presentados en la biblioteca
  • Buzón de opinión, donde se recogen los comentarios de los alumnos. 
  • Elección del personaje del mes. 
  • Cartel en la biblioteca para recoger opiniones y reseñas sobre los libros. 
  • Colaboración de los lectores en la revista escolar con su opinión sobre lecturas.

Estas actividades favorecen la lectura como comunicación permitiendo la confrontación de criterios.

Para conseguir estos resultados debemos insistir en la importancia que tiene el proponer lecturas variadas, combinando libros de ficción, cómics, libros informativos, etc., buscar la pluralidad de intereses lectores y favorecer su enriquecimiento, pues es necesario utilizar diversas estrategias de interpretación para acceder a los diferentes tipos de texto.

Guías de lectura:

Las guías de lectura son listados de libros que se seleccionan desde la biblioteca y que ofrecen una propuesta de calidad a los lectores. En principio, estas guías permanecen en la biblioteca pero también pueden ser enviadas a las aulas o a las familias.  

Se convierten así en materiales que difunden y extienden las recomendaciones de la biblioteca fuera de ésta. (Pueden ser enviadas también a centros culturales, asociaciones, hospitales, etc.).


Las guías deben estar bien estructuradas y aclarar aspectos concretos con la ayuda de apartados que permitan un mejor conocimiento del tema abordado. Pueden llevar una breve reseña con el fin de orientar sobre los contenidos de cada obra y la edad de los destinatarios.

Estas guías pueden realizarse en torno a diferentes criterios: 

Contenidos Ejemplos
  • Un tema. Sirve para agrupar diversos tipos de lecturas, con diferente tratamiento.
  • El miedo. 
  • La ecología. 
  • La diferencia. 
  • La luna, etc.
  • (Buscar temas de interés para el centro escolar o temas de moda o actualidad)

  • Una edad.
  • Libros para primeros lectores. 
  • Lecturas para adolescentes, etc.
  • Un género.
  • El teatro. 
  • El cuento. 
  • Los diarios. 
  • La poesía. 
  • Adivinanzas, canciones.
(Una oportunidad para ofrecer tipos de textos poco solicitados)
  • Un acontecimiento de actualidad.
La biblioteca se presenta como un espacio vivo, en contacto con lo que ocurre en el exterior.
  • Libros de bicicletas (vuelta ciclista). 
  • Deportes (olimpíadas). 
  • Príncipes y princesas (boda real). 
  • La paz (una guerra).


Las guías de lectura deben tener un atractivo estético pues su función es hacer publicidad de los libros, invitar a los lectores a sentirse atraídos por ellos. Se pueden realizar en imprenta con mayor calidad gráfica o se puede optar por la fotocopia si el presupuesto es escaso. En cualquier caso, es importante que estén muy claros los contenidos, que no sean excesivos para no abrumar con demasiada información y que presenten una oferta de cierta calidad.  

El proceso de elaboración puede hacerse consultando los catálogos de las editoriales, los listados bibliográficos que publican algunas instituciones y acudiendo a las bibliotecas públicas.  

Estos materiales tienen sentido en sí mismos, pero adquieren mayor fuerza si se realizan junto a una actividad de animación, con una exposición o acompañando un taller. De esta forma, despertamos con mayores garantías el interés de los lectores por los libros que se ofrecen en la guía.

Clubs de lectores:

Son grupos de niños o jóvenes que se reúnen periódicamente en la biblioteca para comentar sus lecturas e intercambiar sus opiniones. Con estas actividades se favorece la creación de una "comunidad de lectores" (término utilizado por la profesora Teresa Colomer), es decir, que la lectura reúne a un grupo de individuos a partir del conocimiento común de un autor, un tema o un hecho literario compartido.

 Esta dimensión de la lectura como un placer que no sólo se disfruta en soledad sino que favorece la comunicación con el grupo, es uno de los aspectos más gratos y enriquecedores que aportan estos clubs de lectura a los niños y jóvenes participantes. Se llevan a cabo desde hace años en algunas bibliotecas públicas, como, por ejemplo, la de Clamart, en París.6 Las recomendaciones de los adultos les llegan en muchos casos con la dificultad que se deriva de la diferencia de intereses, propuestas y gustos.

Por tanto, resulta fundamental el favorecer una vía de información horizontal, entre iguales. Esta es una de las razones por las que surgen en las bibliotecas los clubs de lectores que, asesorados por el bibliotecario, exponen a los demás su opinión sobre los libros que previamente han leído. El hecho de tener que presentar los libros a los demás les descubre el aspecto utilitario, comprenden que su aportación ayudará y estimulará a otros, aprendiendo a valorar las opiniones del grupo. En muchas ocasiones el club de lectores tiene un espacio propio donde expresar opiniones y comentarios, mediante diferentes posibilidades de comunicación que trascienden la propia biblioteca (programa de radio, revista escolar, etc.).    

EJEMPLOS
OBJETIVOS
  • Programa de radio (se emite en la escuela o en la radio local. Onda pirata 

  • Desarrollo de la expresión oral. 
  • Conocimiento de un lenguaje específico. 
  • Descubrimiento de la lectura en otros soportes.
  • Revista escolar realizada por los alumnos. 

  • Pueden participar diferentes niveles con distintas responsabilidades.
  • Favorece el trabajo en equipo. 
  • Desarrollo de la escritura. 
  • Conocimiento de la prensa. (Diferentes modos de expresión) 
  • Desarrollo de la creatividad plástica: maquetación, ilustraciones.
  • Tablón de anuncios, carteles. 

  • (En un mural en la biblioteca)
  • Desarrollo de la escritura. 
  • Convertir la biblioteca en un espacio de los lectores para los lectores. 
  • Conocimiento de técnicas de publicidad, estética, etc.
 



Todas las actividades que se explican en este apartado no son propuestas aisladas sino que se relacionan entre sí, pues en muchos casos persiguen los mismos fines.

Además, se enriquecen con nuevos aspectos ya que se necesitan conocimientos que van más allá de lo literario, por ejemplo, en el caso de la realización de un programa de radio, de un periódico, etc. Por otra parte, estos soportes resultan muy motivadores para los alumnos.

Encuentros con autores

El hecho de establecer un contacto personal con un autor tiene un atractivo importante, al que no somos ajenos los adultos. Una persona tan especial, con una profesión que tiene algo de mágico, se acerca al mundo cotidiano de los lectores para desvelar sus rasgos humanos. La atracción y la curiosidad por conocer qué se esconde detrás de estos personajes impacta siempre.

Los encuentros de los alumnos con autores de literatura infantil y juvenil se proyectan desde la biblioteca escolar para hacer que , en ocasiones, ésta sea foro de debate sobre la lectura, favoreciendo el intercambio de experiencias entre escritor y lectores. Esta actividad ayuda a los alumnos a interesarse por el acto de escribir y les invita a descubrir sus posibilidades creativas. Los lectores desmitifican así la profesión de escritor considerándola más cercana, más real.

Por otra parte, una lectura exhaustiva del mismo autor permite a los alumnos adivinar las claves que presiden su obra, conocer un estilo propio de escribir y establecer comparaciones con otros autores.  

Para alcanzar un resultado positivo los educadores deben hacer una lectura de la obra del autor que van a presentar a los alumnos, recibiendo previamente del responsable de la biblioteca del centro documentación sobre el escritor y su producción literaria. A continuación, se preparan las actividades de motivación que intenten despertar el interés de los alumnos por alguno, al menos, de los libros.  Proponemos aquí dinámicas divertidas que permiten al alumno elegir con libertad el libro que más le interese dentro de la obra del autor y decidir su propio ritmo de lectura. Dos ejemplos son:

Encuentro con Andreu Martín
Encuentro en la biblioteca con Andreu Martín.

 

Encuentro con Roald Dahl

Experiencia en una escuela con Roald Dahl.

 

 

En algunos casos, cuando el centro escolar no cuenta con un presupuesto para acometer el gasto de la estancia del autor, las editoriales pueden colaborar económicamente. Sin embargo, hay que establecer claramente algunos requisitos imprescindibles, como el que no se utilicen estos encuentros como medio para vender libros, ofrecer toda la obra del autor y, algo muy importante, reunir para estos encuentros a pequeños grupos con el fin de favorecer un verdadero intercambio de experiencias y opiniones.  

Muchas veces los adultos que organizamos estas charlas nos preocupamos por la cantidad de preguntas obvias, muy parecidas siempre, que los chicos hacen a los autores. No olvidemos que se trata de curiosidades que para ellos tienen sentido. No obstante, la preparación previa de la lectura de los libros y una reflexión en clase ayudarán a los alumnos a profundizar en sus preguntas y el encuentro resultará más enriquecedor para todos.

Libro-fórum:

Es necesario que la biblioteca escolar tenga vida, que se convierta en un espacio para la comunicación. Ésta puede darse en varias direcciones:

Modos de comunicación:

Lector << Libro Lector << Otros lectores Adultos (Bibliotecarios, profesores) << Lectores

En este sentido, en muchas bibliotecas se realiza una actividad denominada Libro-Fórum, que engloba todas estas posibilidades comunicativas que surgen a partir de la lectura común de un libro.


Se propone el título elegido al grupo de alumnos teniendo siempre en cuenta los intereses y experiencias de los lectores.

Pasado el tiempo adecuado para su lectura, se establece una fecha de reunión donde se realiza la exposición del libro por parte del grupo.

Estos alumnos deben ser informados previamente sobre algunas pautas que han de observar. Durante el debate el bibliotecario participa como moderador, no imponiendo criterios propios sino facilitando que sean los alumnos los que lleguen por sí mismos al análisis de los contenidos.  

Esta actividad no debe organizarse de manera aislada pues a partir de la práctica de este tipo de debates los lectores desarrollan gradualmente su capacidad para reflexionar sobre aspectos más profundos de la lectura. Para ello el bibliotecario hace preguntas a los alumnos que les van dando pautas sobre lo más interesante de un libro.

Así mismo, es importante insistir en preguntas como ¿qué es lo que más os ha gustado? ¿cuál fue la situación más divertida? ¿con qué personaje os identificáis? etc. De este modo se pone de manifiesto el sentido placentero que aporta la lectura.  La elección de los libros es importante. No vale cualquier cosa. Se pueden elegir títulos que sean polémicos, ambiguos en su planteamiento, con finales abiertos, etc. Los chicos, entonces, deben tomar partido, exponer una opinión con mayor riesgo de confrontación, con lo que se enriquece su experiencia de lectura.  

En algunos casos se proponen libros que tienen una versión cinematográfica y se comparan así dos lenguajes diferentes para una misma historia.

Temas, géneros y personajes:

La biblioteca es un espacio de libertad donde debe asegurarse la posibilidad de elección por parte de los lectores, respetando sus gustos e intereses.

Sin embargo, como mediador, el bibliotecario tiene la responsabilidad de ayudar a crecer a los alumnos y alumnas en su proceso lector, provocándoles continuamente con sugerencias atractivas de lectura. La biblioteca se concibe así como un lugar para descubrir diferentes y variadas opciones que dan respuesta a múltiples necesidades. Es necesario formar a los usuarios para que sean capaces de desenvolverse con facilidad entre distintos géneros, temas y soportes.

De este modo, desde la biblioteca se plantea la realización de actividades dirigidas a descubrir las claves de un género literario o las posibilidades de tratamiento e interpretación de un tema concreto.

Éstas se planifican a lo largo del año, dentro del proyecto general de la biblioteca, y tienen un carácter más esporádico, con diferente duración unas de otras, de acuerdo con la dinámica del centro escolar.  

Las propuestas deben hacerse de forma compartida entre bibliotecarios y docentes, con el fin de que respondan más eficazmente a las necesidades de la escuela y formen parte de la Programación General Anual, implicando así, desde la lectura, a todas las áreas curriculares.

Estas actividades se complementan además con talleres, exposiciones, charlas, etc., con lo que se obtiene una visión más amplia del tema elegido.

Diseñado el plan de lectura, hay que planificar de igual modo las actuaciones y bloques de actividades que en él se contemplen.

El esquema siguiente recoge el proceso de realización de un programa de animación elaborado en torno a un tema, un género, etc.  

Procedimiento para diseño de animaciones:
TEMAS
ACTIVIDADES
  • La NOCHE 
    Viaje a la noche
  • Recopilación de canciones y poemas sobre la noche, la luna, la oscuridad. 
  • Catálogo de personajes literarios nocturnos (vampiros, búhos, personajes de los sueños.) 
  • Velada de cuentos al anochecer. 
  • Representación teatral de un cuento al aire libre con la noche como escenario.
  • El AMOR 
    Cartas de corazones

  • Encuentro con un autor significativo en el tema del amor. 
  • Concurso de declaraciones de amor. 
  • Ciclo de películas de amor. 
  • Lectura de poemas románticos en voz alta.
  • La COMIDA 
    Cocina para gigantes

  • Taller de cocina donde se realizan diversos guisos a partir de la lectura de recetarios de cocina o inspirándose en obras literarias. 
  • Actividades de creación literaria utilizando el lenguaje culinario (palabras dulces o picantes, historias saladas, frases tiernas...). 
  • Recopilación de refranes y expresiones populares inspiradas en la comida.
  • La ECOLOGÍA
  • Elaboración de un dossier de prensa a partir de sucesos sobre temas medioambientales. 
  • A partir de problemas ecológicos planteados en otras literarias, organización de libro-fórums, confrontando opiniones y puntos de vista.
   
GÉNEROS ACTIVIDADES
  • El TEATRO
  • A partir de una historia con final abierto, representar con mímica distintas versiones elaboradas en equipos. 
  • Acudir a representaciones teatrales diversas: teatro de calle, una ópera, teatro experimental. 
  • Adaptar un cuento a la estructura de una obra dramática. 
  • A partir de la lectura de una obra teatral, trabajar la escenografía, investigando para ello en libros informativos.
  • Los DIARIOS
  • Exposición y presentación de libros de ficción escritos en forma de diario. 
  • Presentación de personajes que exponen a los niños y niñas diferentes tipos de diario: diario íntimo, diario de un navegante, diario de un biólogo, diario de unas vacaciones. 
  • Realización de un diario aprovechando una época especial para el centro: semana del libro, carnavales, una excursión, etc.
  • Las CARTAS
  • Correspondencia con los lectores de una biblioteca escolar de otra ciudad. (Contar cómo es la vida de la biblioteca, sus libros preferidos.) 
  • Envío de cartas a los autores. 
  • Entrevista con un cartero de la ciudad. Se prepara, previamente, por parte de los niños (realización de las preguntas, documentación sobre el tema.) 
  • Diseño de sellos especiales para cartas fantásticas.
  • El HUMOR
  • Narración de cuentos de humor. 
  • Lectura en voz alta de fragmentos humorísticos, extraídos de obras clásicas (El Quijote, El Lazarillo.) y posterior elaboración de un cómic basado en dicho suceso. 
  • Realización de caricaturas a partir de descripciones de personajes que aparecen en las obras humorísticas.
 
 
PERSONAJES LITERARIOS ACTIVIDADES

TINTÍN

  • Recopilación de insultos y expresiones malsonantes puestas por Hergé en boca del capitán Haddock. 
  • Elaboración de una guía de viajes a partir de la lectura de las aventuras de Tintín. 
  • Redacción de supuesto diálogo entre Tintín y un viajero de hoy.
PinochoPINOCHO 

 


  • Concurso de mentiras y travesuras. 
  • Taller de marionetas de madera. 
  • Búsqueda en las obras de ficción de personajes famosos por su nariz (como Pinocho). 
  • A partir de la lectura de la obra original de Collodi, tratar de situar en un mapa de Italia los escenarios de sus aventuras, utilizando las sugerencias de la propia obra.

SHERLOCK HOLMES

  • Lectura de pistas para deducir la identidad del asesino en una obra de Sherlock Holmes. 
  • vídeo-fórum donde se compara el relato de Conan Doyle con una de sus adaptaciones cinematográficas. 
  • Lectura de fragmentos de obras de Conan Doyle donde se describen personajes malvados y confección de retratos robots para un fichero policial de sospechosos.
Robinson CrusoeROBINSON CRUSOE 

 


  • Exposición de libros informativos sobre supervivencia. 
  • Envío de mensajes en botellas a otros colegios. 
  • Realización del diario de un supuesto náufrago durante su estancia en una isla desierta. 
  • Debate sobre el tratamiento del náufrago en diferentes narraciones de "robinsones".

3. 2. Animar a leer desde la escritura Lectura y escritura

Desde la perspectiva de la promoción de la lectura la escritura se percibe como una tarea estrechamente ligada al hábito y el placer de leer. Supone reforzar la relación entre el niño y el lenguaje, el que moldea con la escritura y del que se apropia activamente. Esta posición activa alimenta su papel como lector favoreciendo no sólo el aumento de sus lecturas sino también un crecimiento cualitativo de éstas.  

Al igual que en el caso de la lectura, la sociedad actual exige dominar la escritura para resolver, no sólo asuntos intelectuales sino también de índole cotidiana.

"En este contexto escribir significa mucho más que conocer el abecedario, saber "juntar letras" o firmar el documento de identidad. Quiere decir ser capaz de expresar información de forma coherente y correcta para que la entiendan otras personas."7  

La escuela tiene que responder a estas exigencias fomentando la competencia escrita de los alumnos, con objeto de que los niños lean y escriban mejor todo tipo de textos; porque a escribir se enseña, no surge de la inspiración ni por arte de magia.

"En la escuela nos enseñan a escribir y se nos da a entender, más o menos veladamente, que lo más importante y quizá lo único a tener en cuenta- es la gramática. La mayoría aprendimos a redactar pese a las reglas de ortografía y de sintaxis. Tanta obsesión por la epidermis gramatical ha hecho olvidar a veces lo que tiene que haber dentro: claridad de ideas, estructura, tono, registro, etc. De esta manera, hemos llegado a tener una imagen parcial, y también falsa, de la redacción.  Para poder escribir bien hay que tener aptitudes, habilidades y actitudes."

Es evidente que debemos conocer la gramática y el léxico, pero también se tienen que saber utilizar en cada momento. ¿De qué sirve saber cómo funcionan los pedales de un coche, si no se saben utilizar los pies? De la misma manera hay que dominar las estrategias de redacción: buscar ideas, hacer esquemas, hacer borradores, revisarlos, etc.[...]"8

En el texto anterior, Cassany menciona dos aspectos, aptitudes y habilidades, que están determinados por un tercero, las actitudes hacia la escritura. Así pues, el conocimiento y ejercicio de las estrategias de redacción tiene que apoyarse paralelamente en la motivación, en un acercamiento lúdico y placentero a la escritura.

Hay que ayudar a los alumnos y alumnas a encontrarle sentido a la escritura, destacando su utilidad y los beneficios personales que reporta y presentándola en contextos variados.  

Esta amplia contextualización de la escritura pone de relieve que, si bien es una tarea especialmente ligada al área de Lengua y Literatura, ninguna disciplina puede dejarla al margen y que a todas compete tal y como se refleja en el cuadro siguiente:  

TIPO DE ESCRITURA 

CARACTERÍSTICA
FORMA

P E R S O N A L

Objetivo básico: explorar intereses personales. 

Audiencia: el autor.

  • Base para todo tipo de escritura.
  • Tiene flujo libre.
  • Fomenta la fluidez de la prosa y el hábito de escribir.
  • Facilita el pensamiento.
  • Diarios personales. 
  • Cuadernos de viaje y de trabajo. 
  • Ensayos informales y narrativos. 
  • Escribir a chorro. 
  • Torbellino de ideas. 
  • Ideogramas.
  • Recuerdos.  
  • Dietarios.  
  • Listas. 
  • Agendas. 
F U N C I O N A L

Objetivo básico: comunicar, informar, estandarizar la comunicación 

Audiencia: otras personas.

  • Es altamente estandarizada.
  • Sigue fórmulas convencionales.
  • Ámbitos laboral y social.
  • Correspondencia comercial, administrativa y de sociedad. 
  • Cartas.  
  • Contratos.  
  • Resúmenes.  
  • Memorias. 
  • Solicitudes. 
  • Invitaciones. 
  • Felicitaciones.
  • Facturas.  
C R E A T I V A

Objetivo básico: satisfacer la necesidad de inventar y crear. 

Audiencia: el autor y otras personas.

  • Expresión de sensaciones y opiniones privadas.
  • Busca pasarlo bien e inspirarse.
  • Conduce a la proyección.
  • Experimental.
  • Atención especial al lenguaje.
  • Poemas. 
  • Mitos.  
  • Comedias. 
  • Cuentos. 
  • Anécdotas. 
  • Gags. 
  • Novelas. 
  • Ensayos. 
  • Cartas. 
  • Canciones. 
  • Chistes. 
  • Parodias.
 
 
CARACTERÍSTICA
FORMA
E X P O S I T I V A

Objetivo básico: explorar y presentar información. 

Audiencia: el autor y otras personas.

  • Basado en hechos objetivos.
  • Ámbitos académico y laboral.
  • Informa, describe y explica.
  • Sigue modelos estructurales.
  • Busca claridad. 
  • Informes. 
  • Exámenes. 
  • Cartas. 
  • Ensayos. 
  • Manuales. 
  • Periodismo. 
  • Literatura científica. 
  • Noticias. 
  • Entrevistas.
  • Normativa. 
  • Instrucciones. 
P E R S U A S I V A

Objetivo básico: Influir y modificar opiniones. 

Audiencia: otras personas.

  • Pone énfasis en el intelecto y/o las emociones.
  • Ámbitos académico, laboral y político.
  • Puede tener estructuras definidas.
  • Real o imaginado.
  • Editoriales. 
  • Cartas. 
  • Panfletos. 
  • Ensayos. 
  • Opinión. 
  • Publicidad. 
  • Anuncios. 
  • Eslóganes. 
  • Peticiones. 
  • Artículos de literatura científica.

[extraído de Sebranek, Meyer y Kemper, 1989] Recogido por Daniel Cassany en "La cocina de la escritura"9
 

El despertar a la escritura se contempla como un proceso gradual que se inicia en el juego y se potencia la escritura creativa en los talleres de cuentos dirigidos a las primeras etapas escolares. Esta tarea tiene su continuación en los talleres literarios en la escuela en los que se intenta que el alumno conozca más a fondo los diferentes tipos de textos (narrativos, dramáticos, poéticos, periodísticos,), los procesos de creación y las estrategias de escritura.

Actividades:

En este apartado se ofrecen diversos bloques de actividades que tienen como eje la escritura, con objeto de mostrar distintas posibilidades de encauzar el trabajo.

Los supuestos prácticos que se recogen son una pequeña muestra orientativa, que puede completarse con las referencias bibliográficas que se incluyen al final del capítulo y con las propias iniciativas de las personas encargadas de realizar la tarea.

Juego con el lenguaje:

Estas actividades persiguen mantener y reavivar la relación lúdica que el niño tiene con las palabras en sus primeros años. Constituyen una invitación a que pierda el miedo al lenguaje, a que juegue con la grafía de las letras y con el sonido de las palabras.

Buscan desatar el humor y el regocijo, provocando rupturas y choques gramaticales, trastocando el sentido de la lengua hasta rozar el absurdo. En definitiva, pretenden favorecer una relación placentera con la palabra, moldearla y estimular la creación de pequeños textos que preparen el camino a un mayor desarrollo de la expresión escrita.

Algunos ejemplos son:
 

El provocar historias da salida a la necesidad de los niños de crear e inventar . A la hora de estimular al niño a escribir historias, conviene ofrecerle múltiples y variadas propuestas de las cuales partir, con objeto de huir de la repetición y la monotonía.

La propuesta de escritura ha de buscar romper con el mimetismo y la reproducción de estereotipos televisivos, sociales, etc., para lo que resulta interesante valerse de un amplio conjunto de elementos de provocación que busquen la sorpresa y hagan saltar la chispa creativa en los textos infantiles, forzando encuentros inhabituales que exijan el trabajo creativo del niño, que estimulen su imaginación y den pie al relato fantástico.

Gianni Rodari ofrece innumerables y ricas propuestas para trabajar en este sentido y existen interesantes obras que recogen estrategias y juegos orientados a provocar historias, individuales o colectivas, en la línea de las que siguen:

Juego poético:

Los talleres de poesía ofrecen muchas posibilidades de disfrute con el lenguaje y aportan innumerables valores en el desarrollo de la capacidad de expresión de los niños a la vez que le abren el camino hacia el encuentro con los poetas y con la propia creación poética. La poesía aporta al niño una dimensión estética del lenguaje y le ofrece vivencias sensoriales y emotivas a través del poder evocador de las palabras, la sonoridad, el ritmo, la rima, las imágenes, a la vez que permite su recreación utilizando otras formas de expresión como la plástica, la música o la expresión corporal.

El juego, el humor y el absurdo, son elementos que tampoco han de faltar en esta invitación a la poesía. Una gran fuente de la que partir es el legado de la poesía de tradición oral. La biblioteca escolar ha de desarrollar un trabajo tendente a:

Durante este proceso puede implicarse también a la familia, arbitrando una especie de libro viajero que recorra las casas de los alumnos con objeto de que abuelos y padres hagan su aportación y escriban en él su memoria poética.

Respecto al acercamiento de los títulos de poesía de la biblioteca a los niños y jóvenes, cabe la posibilidad de dedicar espacios para la lectura y presentación de obras y autores, elaborar guías de lectura, etc.

Los propios alumnos pueden ser los encargados de realizar selecciones y recopilaciones temáticas de poemas (sobre la Navidad, la noche, los animales,) valiéndose de las obras de la biblioteca escolar y crear archivos que queden en la biblioteca para poder ser consultados posteriormente. Un carácter más estable y continuado tienen los Talleres de Poesía y Creación Poética. Los cuadros que siguen pueden servir de orientación para el trabajo con las estructuras poéticas según las edades del alumnado.10   

LA EDUCACIÓN ESTÉTICO LITERARIA EN LA VIDA DEL NIÑO
E. INFANTIL Y PRIMER CICLO DE E. PRIMARIA
 
 
MATERIALES
ESTRUCTURAS POÉTICAS
RECURSOS POÉTICOS
ESTADIO
  • Cancionero infantil 
  • Cancionero popular 
  • Romancero 
  • Cuentos corporales 
  • Poetas que escriben desde la tradición oral: Lorca, Fuertes, Machado, Alberti, Juan Ramón... 
  • Cuentos maravillosos. 
  • Cuentos populares. 
  • Libros, libros, libros.
  • Enumeración 
  • Verso y coro 
  • Enumeraciones corporales 
  • Verso y onomatopeya 
  • Verso y estribillo. 
  • Enumeraciones. 
  • Preguntas y respuestas. 
  • Pareados. 
  • Diálogos. 
  • Enumeraciones: sorteos. 
  • Encadenados. 
  • Adiciones. 
  • Sustracciones. 
  • Cuartetas. 
  • Tercedillas.
  • Ecos y rimas. 
  • Onomatopeyas. 
  • Aliteraciones. 
  • Apóstrofes. 
  • Analogías. 
  • Comparaciones 
  • Asíndeton. 
  • Polisíndeton. 
  • Anáforas. 
  • Hipérbaton.

Fonetico:

  • Prosodia

Morfología.

  • Sustantivo.
  • Verbo.
  • Sustantivo +  
    Adjetivo.
   
 
LA EDUCACIÓN ESTÉTICO LITERARIA EN LA VIDA DEL NIÑO
SEGUNDO CICLO DE E. PRIMARIA
 
 
MATERIALES
ESTRUCTURAS POÉTICAS
RECURSOS POÉTICOS
ESTADIO
  • Cancionero popular. 
  • Romancero. 
  • Cancionero infantil. 
  • Poetas que escriben desde la tradición oral: Lorca, Lope, Alberti, Juan Ramón, Tirso. 
  • Leyendas y mitos. 
  • Libros, libros, libros.
  • Todas las de E. Infantil y 1º ciclo de E. Primaria, mezcladas y complejas 
  • Cuartetas. 
  • Tercedillas. 
  • Aleluyas. 
  • Romances. 
  • Villancicos.
  • Aliteraciones complejas:
    Trabalenguas
  • Comparaciones cultas:
    Adivinanzas. 
     
    Greguerías.
  • Anáforas. 
  • Hipérbaton. 
  • Imagen poética. 
  • Metáfora.
  • Dominio absoluto de lo fonético

    Morfología  Sustantivo + Adjetivo Verbo + Preposición.   Sustantivo + Adjetivo + Verbo + Preposición = ORACIÓN SIMPLE

     
 
ORDENACIÓN SISTEMÁTICA DE LAS ESTRUCTURAS POÉTICAS
 
3 AÑOS
  • Verso y coro.
Teresa la marquesa... 

Me gusta Carolina...

  • Preguntas y respuestas.
¿Dónde estás?, En tabletas...
  • Diálogos.
Yo soy la viudita... 

Tengo, tengo, tengo... 

¿Dónde están las llaves?...

4 AÑOS
  • Enumeraciones.
Cucú, cantaba la rana... 

A la una la aceituna...

6 AÑOS
  • Adición.
Real y medio... 

La desdentada...

7 AÑOS
  • Sustracción.
Yo tenía diez perritos...
  • Refranes abiertos.
En abril, aguas mil (en enero...) 

En martes, ni te cases...(en lunes...)

  • Trabalenguas.
Un tigre... 

Pablito clavó...

8-9 AÑOS
  • Encadenamientos.
Esta es la llave de Roma y toma... 

En Sevilla hay una casa...

  • Complicación de las estructuras anteriores. 

  • Trabalenguas complejos.
El arzobispo de Constantinopla... 

Tengo una cabra ética, perlética...

  • Sin sentidos.
Pin pin zaramacatín... 

Curú curú cufá... 

Pin pineja...

  • Adivinanzas.
Alto como un pino...
A PARTIR DE 10 AÑOS...
  • Aleluyas, romances, villancicos...
 
  ENTREACTO

"Las palabras corren a cambiarse
de vestido. Se bajan los telones y las bambalinas vienen de nuevo sobre los bastidores. Sujetos, verbos y adverbios, vestidos ya de otra manera, vuelven a escena. Queda un grupo de adjetivos mirando por la abertura del telón. Va a empezar el poema siguiente."
Joan Brossa

Algunas sugerencias:

La prensa y la animación a la lectura

Se ha optado por incluir el trabajo con la prensa en el apartado de la escritura, teniendo en cuenta que la capacidad de los alumnos para elaborar un producto periodístico propio estaría en la fase final del proceso.

De entre los múltiples recursos que la biblioteca escolar puede aportar para la animación a la lectura, la prensa es quizá uno de los medios más ricos, complejo y lleno de posibilidades. Los periódicos ofrecen una mirada viva y dinámica de los acontecimientos más relevantes de nuestro entorno, son un medio presente y cotidiano. La prensa forma parte de la dotación básica de cualquier biblioteca escolar. Es un material barato, reciclable y cuya rentabilidad didáctica ya nadie se atreve a discutir.

Dicha circunstancia convierte a este medio en un potencial protagonista de la dinámica bibliotecaria: recoger noticias, procesar la información que ofrecen, seleccionar productos periodísticos para su uso en el aula, dar a conocer sus géneros o coordinar proyectos interdisciplinares a partir del seguimiento de un tema, son sólo alguna de las innumerables posibilidades de aprovechamiento de este medio en la biblioteca.


El trabajo con la prensa es un vasto territorio que abarca desde la lectura crítica de noticias (relación medio-receptor) hasta la producción informativa (relación medio-emisor). Estudiar su posible utilización exige un trabajo de sistematización que permita trazar un itinerario propio.

De otro modo, la ingente maraña de sugerencias didácticas publicadas en los últimos años puede enredar a bibliotecarios y docentes en un activismo estéril. Algunos materiales pueden resultar especialmente útiles para organizar un proyecto coherente en torno a la biblioteca escolar.

El programa Prensa-Escuela del Ministerio de Educación11 generó un conjunto de recursos de apoyo cuya validez continúa vigente. A partir de estos materiales, se propone una clasificación que, si bien no es completa, puede servir para encuadrar las principales prácticas realizables con la prensa.

En ella se establecen diferentes momentos que, aunque pueden simultanearse, suponen a largo plazo un proceso de aprendizaje por la progresiva incorporación de nuevas habilidades a la relación de los alumnos con este medio.

 UTILIZACIÓN DE LA PRENSA EN LA BIBLIOTECA ESCOLAR
 
DINÁMICAS
ESTUDIAR CON LA PRENSA
  • Acceder a la actualidad, informarse. 
  • Buscar y seleccionar noticias relacionadas con ciertos contenidos curriculares. 
  • Elaborar dossieres informativos a partir de noticias, comentarios, material gráfico...
  • Trabajar temas interdisciplinares desde la perspectiva de distintas materias.
ESTUDIAR LA PRENSA
  • Analizar la prensa como fenómeno social
  • Estudiar las características y el lenguaje de la prensa: 
    • tipos de diario 
    • secciones 
    • géneros periodísticos 
    • estructura de la noticia 
    • los titulares 
    • la imagen de la prensa
  • Leer críticamente la prensa.
PRODUCIR PRENSA
  • Construir un mural de noticias
  • Redactar el periódico escolar.

Las funciones documental, didáctica y disciplinar de la prensa escrita pueden estudiarse con más detalle en el material del mencionado Programa Prensa-Escuela. En él se ofrece una extensa bibliografía que puede ampliar esta información.

En cuanto a la producción periodística propiamente dicha la biblioteca escolar es un ámbito privilegiado por su oferta de recursos (diarios, dossieres y otros materiales documentales), que puede aglutinar el esfuerzo de toda la comunidad, recabando los materiales elaborados en el centro y articulando, en un equipo integrado por bibliotecarios y docentes, la realización del periódico escolar. Afrontar la realización de un periódico resulta en ocasiones un proceso demasiado costoso, tanto en el aspecto material como en lo referente a técnica y recursos humanos.

Gran número de profesores han visto frustrados muchos esfuerzos e ilusiones por un cálculo poco realista de sus posibilidades. Para evitar estas situaciones es preciso analizar pormenorizadamente el tipo de proyecto que quiere emprenderse, planificar las tareas que requiere y valorar con realismo la capacidad del centro para asumirlo.

En cualquier caso existe una alternativa más sencilla y económica: el periódico mural.

El periódico mural admite múltiples modalidades:

Esta tipología de periódicos-mural es también aplicable a los periódicos impresos, aunque el proceso de elaboración es en este caso más complejo.

El periódico escolar es el órgano de expresión del centro, la publicación que reúne lo más destacado de la actualidad escolar así como las opiniones de profesores, alumnos y, en general, de toda la comunidad educativa. Un medio de estas características ofrece la oportunidad de motivar a los alumnos para investigar, imaginar y producir textos que son fruto de los procesos de aprendizaje desarrollados en los diferentes ámbitos.

Tal vocación recopiladora es patrimonio de la biblioteca escolar y este es por tanto el ámbito por excelencia para esta producción colectiva. La redacción de un periódico tiene sus propios sistemas de organización y planificación. De otro modo resultaría imposible abordar tareas tan diversas como la búsqueda de la noticia, la realización de entrevistas y fotografías, la redacción de artículos, la distribución de noticias y titulares, la diagramación, etc. Coordinar estas funciones dentro de una comunidad tan numerosa y activa como la escolar exige una gran sistematización de los procesos.

El punto de partida pueden ser la funciones periodísticas que se han mencionado, coordinadas por diferentes profesores: el profesor de lengua puede supervisar el trabajo del equipo de redactores, el de plástica coordinar a los fotógrafos, el de informática orientar al taller de diagramación, etc.

El objetivo es aprovechar los recursos materiales y humanos del centro para desarrollar este proyecto.

Los miembros de los diferentes equipos de trabajo han de asumir sus responsabilidades de un modo voluntario: los alumnos y alumnas deciden libremente su participación en la gestión del periódico. Sin embargo, la práctica en las aulas puede generar interesantes materiales que pueden ser igualmente publicados. Esto sólo es posible si todo el profesorado entiende este proyecto como una empresa multidisciplinar y como una fuente de experiencias didácticas que enriquece su labor educativa.

El papel del bibliotecario, además del de dinamizador de este proceso es, necesariamente, el de apoyar constantemente los diferentes proyectos periodísticos con los recursos documentales disponibles.

Se trata no sólo de facilitar la elaboración de reportajes, entrevistas y otros textos con el aporte de información sino de generar paralelamente procesos formativos que contribuyan a que los participantes conozcan las técnicas documentales (como, por ejemplo, la elaboración de dossiers) que complementan el trabajo en el periódico.

Buenas noticiasAsí mismo, en coordinación con los profesores, afrontará otras líneas de actuación relacionadas con la animación a la lectura que produzcan, a su vez, textos publicables: creaciones literarias (cuentos, poemas), reseñas críticas de libros, guías de lectura, etc... Es sin duda un proyecto complejo y ambicioso, pero que puede ser llevado a cabo en equipo (esto es fundamental) y que admite diferentes niveles de implicación curricular. Así lo ponen de manifiesto algunas experiencias concretas desarrolladas en distintos ámbitos:
 

La lectura, un suceso de primera páginaLa lectura, un suceso de primera página. Un trabajo desarrollado en el C.P. Elena Sánchez Tamargo de Asturias que se apoya en el trabajo interdisciplinar para relacionar la lectura de la prensa y los libros de literatura infantil y juvenil. 

Crónicas de un tal JuanCrónicas de un tal Juan: actividad desarrollada en el Centro Internacional del Libro Infantil y Juvenil en colaboración con diferentes centros escolares de Salamanca como preparación de un encuentro de los alumnos con el escritor Juan Farias. En esta animación el periódico sirvió como vehículo para el estudio de los principales elementos presentes en la obra de este autor dando pie a la creación literaria de los niños. 

Aventuras en primera planaRecomendamos, por último, una selección de obras dirigidas al público infantil y juvenil que ayudan a conocer de cerca el mundo periodístico. Se trata de una selección de libros informativos y de ficción, películas y revistas, agrupadas bajo el título "Aventuras en primera plana". 

La escritura como actividad documental

Las actividades de escritura, camino de experimentación comunicativa y de acercamiento a la lectura, adquieren en la biblioteca escolar una dimensión documental que entronca esta faceta creativa con las destrezas de búsqueda y procesamiento de la información. El objetivo es ampliar la función recopiladora de la biblioteca a los textos de los alumnos, bien sean producciones literarias o escritos de carácter informativo. De este modo la escritura es valorada en su doble sentido:

Los escritos de los alumnos pasan a formar parte de los fondos de la biblioteca convirtiéndose en fuente informativa, en material de referencia para posteriores estudios o para nuevas creaciones que enriquezcan y retroalimenten dichos textos.

Este planteamiento puede tener consecuencias directas en la actitud de alumnos hacia la biblioteca escolar, pues los sitúa en el centro de los procesos comunicativos de la biblioteca y los convierte en protagonistas del hecho lector: un papel privilegiado como emisores y receptores.

Gran parte de los materiales elaborados en el aula o en la biblioteca por los estudiantes puede ser utilizados posteriormente como material documental: biografías, trabajos monográficos, entrevistas, exposiciones, dibujos, poemas, cuentos, reseñas bibliográficas Los docentes y los bibliotecarios deben establecer ciertos criterios que limiten tan extensa producción para evitar dificultades en su almacenamiento.

Además de estos recursos, la función documental de la biblioteca puede impulsar la realización de trabajos específicos, con el doble objetivo propuesto: el desarrollo de aprendizajes (en relación con los procesos creativos e investigadores) y la producción de materiales de lectura.

Estas actividades de escritura promueven en los alumnos el entrenamiento en el uso de otros registros lingüísticos. El lenguaje científico se presenta así como un medio accesible y el conocimiento de sus claves, como un recurso útil que ayuda a expresar conceptos precisos. La habilidad para redactar textos informativos ha de enraizarse en el desarrollo de procesos mentales de cierta complejidad.

La recopilación de información y su integración en un producto con finalidad documental requiere afrontar una tarea de estructuración mental que organice los contenidos y los restituya con claridad: índices, esquemas y apartados deben ser planificados con detalle con el fin de ofrecer un recurso útil para la biblioteca.

De este modo, la escritura es un medio que ayuda a conocer la metodología del trabajo científico, lo que revierte directamente en el desarrollo de capacidades para la lectura y el acceso a la información. Hay muchos proyectos que pueden servir a este fin.

Cada biblioteca escolar puede promover actividades más acordes con sus peculiaridades. Sirvan, pues, estas sugerencias, como una pequeña muestra de posibles propuestas para la elaboración de material documental:

3. 3. Animar a leer desde la oralidad Importancia de la expresión oral

La voz y la palabra están íntimamente unidas al proceso de desarrollo del niño; el lenguaje oral, el sonido, es el elemento base por medio del cual se inicia en el reconocimiento de sí mismo y desl mundo. La biblioteca escolar ha de nutrir la rica relación que niños y niñas mantienen con el lenguaje que se inicia en la primera etapa infantil con las nanas, canciones, fórmulas y pequeñas historias, que les abren la puerta a la adquisición del habla, en un proceso que parte de los primeros balbuceos y que se alimenta a través del oído.  

El trabajo desde la oralidad se desarrolla paralelo al presentado en el anterior apartado de escritura. El punto de partida es el juego oral con el lenguaje en una aproximación fonética a las palabras: asociaciones fonéticas, onomatopeyas, cambios de acentuación, etc., que ofrece indiscutibles posibilidades didácticas en E. Infantil y E. Primaria y está en estrecha relación con los contenidos del área de Lenguaje y Literatura. Potenciar y enriquecer la capacidad de expresión del niño requiere también pel aprovechamiento del rico patrimonio literario oral, fuente inagotable de juego y de ejercicio, aprovechando la capacidad auditiva y de retención del niño.

Las retahílas de juego, refranes, trabalenguas, romances, poemas, cuentos breves, etc., invitan a ejercitar la memoria, la repetición, a recitar, a dramatizar y a narrar. Para acercar al niño las estructuras poéticas, el ritmo, la entonación y la rima cabe retomar las actividades de juego poético, presentadas en el apartado de escritura y trabajarlas oralmente. La práctica continuada de estas actividades redundará en el enriquecimiento del vocabulario del niño, en el refuerzo y mejora de su pronunciación y ampliará sus registros de expresión.  

La narración oral se configura también como un medio de expresión y comunicación muy rico para estimular a la lectura desde la biblioteca escolar. De gran valor educativo, el cuento y el relato pueden servir también como base de otros aprendizajes. El relato oral puede ser utilizado para introducir de forma amena conocimientos referidos a las distintas disciplinas académicas: contextualizar una época en historia, acercarse a un país y a sus costumbres en geografía o aproximarse al conocimiento de un determinado animal en ciencias naturales.  

La biblioteca escolar y el aula acogerán espacios de narración oral que pueden ser estructurados de la manera más conveniente: dirigidos a niveles, a grupos de clase y tener un carácter periódico, espontáneo, puntual, etc. Al margen de los espacios dedicados regularmente a esta actividad, la narración oral tendrá cabida en el desarrollo de programas específicos y puede servir de apoyo para las presentaciones de libros o para la dinamización de exposiciones.

Existe en algunos medios una excesiva identificación entre narración oral y espectáculo, especialmente en las bibliotecas infantiles, donde quizá se ha profesionalizado en demasía esta actividad. Su valor como espacio de comunicación debe primar sobre el valor de la representación.

En este sentido, todas las personas pueden desempeñar la función de narrador sin necesidad de tener especiales dotes actorales. En la escuela es conveniente que los niños vean contar y escuchen leer a sus profesores y que no se deje únicamente esta labor en manos de terceros. Hay muchas formas de narrar y se debe buscar ante todo la que resulte más cercana y cómoda al narrador.  

Habitualmente la narración oral se asocia de manera exclusiva a las primeras edades y si bien en ellas tiene un público especialmente idóneo, no es menos cierto que los preadolescentes y jóvenes también responden muy positivamente a estas experiencias. En todo caso, la selección de las narraciones, su adecuación a la etapa de desarrollo del niño y a sus intereses determinará en gran medida la aceptación de la propuesta.

En cursos superiores se han de incluir relatos literarios, lecturas de poemas o lecturas en voz alta de capítulos de libros para motivar su lectura. Es importante que los niños y jóvenes tomen parte activa en el relato oral, por lo que hay que prever momentos en los que se les invite y estimule a contar y narrar historias y a presentar oralmente las lecturas que más les hayan gustado compartiéndolas con sus compañeros y despertar así el interés del resto del grupo hacia el libro presentado. Estas sesiones pueden llevarse al cabo en un taller de cuentos desarrollado en la biblioteca o en el aula indistintamente.

En determinado momento también puede constituir un medio para implicar a la familia en el trabajo escolar, invitando a padres, madres, abuelos y abuelas a que cuenten sus historias en la biblioteca. Esto puede dar origen a la creación en la biblioteca de una antología de los cuentos narrados por las familias y recogidos en texto, en grabación sonora o en vídeo.

 Contar un cuento

Dentro de la planificación general de actividades se tendrán en cuenta los momentos destinados a la narración oral y el papel que se les asigna en los programas en los que se incluya este tipo de propuestas. Además, cada sesión deberá contar con la necesaria y suficiente preparación para que realmente respondan al objetivo de conseguir entretenimiento, estímulo y enriquecimiento para el niño.  Esta preparación debe tener en cuenta diversos aspectos relacionados con:

La selección de un determinado texto, incluso la forma de presentación y los recursos de los que valerse para narrar, así como la disposición del espacio, dependerán en gran medida de las características del auditorio (edad, capacidad de atención, familiarización con este tipo de actividad.. La obra elegida habrá de ser acorde con los intereses del niño. Si se trata de una narración perteneciente a un libro habrá que adecuarla a su edad, para poder ofrecerlo después como lectura. Es importante que sea un texto con el que el narrador se sienta cómodo, que se adapte a su registro y que le permita transmitirlo con sinceridad y desenvoltura.  El espectro sobre el que elegir es amplio y no tiene por qué limitarse al cuento tradicional. Existen narraciones actuales aptas para ser narradas, siempre y cuando cumplan los requisitos mínimos de estructura: acción, secuencias, conflicto, descripciones no muy largas, etc.

Una vez que el narrador o narradora ha hecho su elección, se entra en la fase de análisis de la historia y de preparación, con objeto de conocerla a fondo y conseguir interiorizarla. A continuación, se ofrecen a modo de guía los pasos a seguir y los elementos sobre los que hay que centrar la atención en esta fase:
 

Es importante crear un clima de atención en torno al narrador que permita disfrutar a fondo de la historia realizando pequeñas intervenciones sobre el espacio:
 

Alternativas a la narración

Las posibilidades de contar y presentar una historia son múltiples y dependerán de los objetivos que se persigan, de los recursos con los que se cuente y de la propia personalidad del narrador. Sobre lo anteriormente expuesto se pueden introducir modificaciones para acercar más la actividad al niño y al propio narrador:

3. 4. Animar a leer desde otros medios

La lectura no se limita necesariamente al código verbal. Vivimos rodeados por una multiplicidad de medios y lenguajes: el cine, la televisión o los anuncios publicitarios forman parte de nuestra cultura. Lamentablemente, este contacto con los medios de comunicación es más una relación de consumo que una postura crítica de lectura.  

Formar lectores supone integrar todo tipo de lenguajes en el programa de lectura del centro, promover una visión global que interrelacione los medios y preparar a niños y jóvenes para acceder, de un modo crítico, a la oferta de lectura que ofrecen las nuevas modalidades audiovisuales.

 Con frecuencia, entre los educadores se observan actitudes culpabilizadoras que enfrentan a la lectura audiovisual (fundamentalmente la televisión, aunque también otros medios como el cómic) con la "auténtica" lectura (los libros). Tal enfrentamiento en nada beneficia el desarrollo lector del niño. Por el contrario, mantiene el prejuicio que asigna al libro un papel educativo y lo constriñe al ámbito escolar: frente a él los audiovisuales serían patrimonio del ocio y, por tanto, una opción voluntaria y más atractiva.  

Es preciso huir de maniqueismos y entender la complementariedad de todos los medios y soportes lectores. Del mismo modo que la animación a la lectura ha de implicar tanto los aspectos artísticos como los informativos, tenemos que ampliar este concepto a otros medios de comunicación que además del verbal utilizan otros códigos como el musical o el iconográfico. Sólo con una acción pedagógica integrada que estimule el desarrollo de la lectura como una capacidad global y multiforme será posible la formación de ciudadanos críticos y conscientes, capaces de acceder a todas las posibilidades de su entorno y su cultura, lo que, en última instancia, es la función esencial de la institución escolar.

  "...texto impreso, sonido e imagen son todos, en sí mismos, caminos de acceso al conocimiento, cada uno a su manera y de modo irremplazable. Tampoco se limitan a la transmisión de informaciones documentales. Discos o casettes, filmes o diapositivas, presentan historias, poemas, pinturas, abriendo así los ojos y los oídos al universo de lo imaginario, de la creación. La biblioteca, fiel a su vocación de centro de información, (...) se convierte, pues, naturalmente en "medioteca". Reunir los diferentes medios de comunicación en un solo y mismo lugar permite al lector aprender a recurrir según los casos al documento más apropiado"12

 Hemos de desarrollar, por lo tanto, iniciativas concretas de actuación en una doble línea:


Animar a leer desde otros medios supone la incorporación de toda una variedad de formas de expresión y comunicación. En el siguiente cuadro se exponen algunas de ellas:  

MEDIOS
ASPECTOS QUE SE TRABAJAN
POSIBLES ACTIVIDADES
La ilustración

La ilustración

1) Análisis de estereotipos transmitidos en la literatura infantil. 

2) Estudio de la narración mediante las ilustraciones. 
 
3) Descubrimiento de la capacidad evocadora de historias que ofrecen las imágenes.  

1.1) Elaborar catálogos de personajes, paisajes, etc.. a partir de la recopilación de ilustraciones tomadas de distintos álbumes. 

1.2) Analizar elementos comunes en diferentes imágenes de un mismo tema. 

2.1) Secuenciar, en varios dibujos, diferentes momentos de un cuento narrado. 

2.2) Mediante símbolos que representan a los personajes, construir una historia en imágenes. 

3.1) Crear textos a partir de ilustraciones aisladas (diapositivas, mural, etc.) 

3.2) Observando pequeños detalles de las imágenes de un cuento, crear una pequeña historia paralela.

El cómic 

El cómic
1) Análisis de los recursos expresivos del cómic: metáforas visuales, movimientos cinéticos, bocadillos, onomatopeyas. 

2) Experimentación del lenguaje del cómic como otra forma de creación y expresión artística.

1.1) Elaborar e intercambiar repertorios gráficos, reuniendo ejemplos de cómo son representadas algunas situaciones: dormir, correr, enamorarse. 

1.2) Escribir un relato completo a partir de una sola viñeta, marcando los antecedentes y las consecuencias de la acción que se presenta (tener en cuenta, para ello, todos los detalles expresivos). 

2.1) Llevar a cabo un taller de creación de cómics (argumento, guión técnico, composición de páginas y desarrollo de la historieta). 

2.2) Adaptar una noticia, fotografía o relato literario al lenguaje del tebeo.

La fotografía
1) Desarrollo de las posibilidades expresivas que permite el trabajo a partir de fotografías. 

2) Utilización de la técnica fotográfica como recurso narrativo.

1.1) Realizar fotomontajes relacionados con temas como el humor, la sorpresa. 

2.1) Elaborar un cuento ilustrado, partiendo de un clásico , con fotografías realizadas por los alumnos. Los niños pueden representar el cuento y decorar los escenarios. 

2.2) Construir una historia secuenciada, acompañada o no de texto, con fotografías realizadas por chicos y chicas. Ej. :Un día en la escuela.

La publicidad
1) Análisis crítico de los mensajes publicitarios. 

2) Estudio de los estereotipos en la publicidad.

1.1) Exponer imágenes aparecidas en prensa y posterior debate. 

1.2) Diversos talleres que relacionan este medio con las áreas transversales. Ej.: La mujer en la publicidad. 

2.1) Recopilar y visionar anuncios grabados por los alumnos en la televisión para realizar, posteriormente, diferentes actividades de análisis: debates, tertulias, mesas redondas, etc...

La música
1) Investigación sobre diferentes corrientes y estilos musicales. 

2) Desarrollo de la capacidad creativa y las posibilidades de relación entre música y literatura .

1.1) Preparar un disco-fórum por parte de un grupo de alumnos, documentándose en la biblioteca para presentar la audición a sus compañeros. 

2.1) A partir de un cuento, construir la banda sonora:

  • con interpretaciones musicales del
  • alumnado.  buscando fragmentos apropiados entre grabaciones musicales.
2.2) Escuchando una melodía, describir por escrito la historia que nos sugiere.

El cine 

El cine
1) Estudio de las relaciones existentes entre cine y literatura. 
 
2) Potenciar el aprendizaje de técnicas cinematográficas con fines creativos.
1.1) Una vez leída una narración, proyectar en la clase un fragmento de una película que cuente la misma historia. Analizar los diferentes recursos empleados en uno y otro lenguaje. 

1.2) Comparar diferentes versiones cinematográficas de una película basada en una obra literaria. 

1.3) Convertir en un guión cinematográfico una narración literaria.

2. 1) Taller de cine.


4. Síntesis del capítulo

En este apartado se ha presentado la animación a la lectura en el contexto de las demandas y exigencias de lectura de la sociedad actual y a la biblioteca escolar como espacio idóneo para la estimulación del hábito lector y para posibilitar múltiples lecturas.

El trabajo de la biblioteca escolar no puede ser aislado sino que ha de contar con el apoyo de toda la comunidad escolar para poder llevar realmente a cabo y con posibilidades de éxito un Programa de Lectura que afecte a todas las áreas curriculares y capacite a los niños y niñas en el ejercicio de una lectura eficaz que responda a variados intereses y registros.

Los programas y actividades de promoción de la lectura deben ser diseñados y planificados convenientemente por el equipo docente y coordinados por el equipo de la biblioteca. Las acciones tienen que ser regulares y constantes, huyendo del artificio y las intervenciones aisladas que no tienen continuidad.

Esto queda justificado en la idea de un proceso de adquisición del hábito de lectura en la infancia y en la necesidad de acrecentar en los niños el placer y el gusto por la lectura. Se han presentado diversas formas de acercamiento a la lectura cuyo fin la es estimular y desarrollar las capacidades de expresión del alumnado. Las estrategias y técnicas que ilustran el apartado de actividades son sólo una muestra de las posibilidades de trabajo. Se insiste en la necesidad de tomarlas como medios y no como fines en sí mismas.
 

La biblioteca escolar como eje de múltiples propuestas de promoción de la lectura
 

  • Desde el libro

    • sugerencias y recomendaciones (presenciales, impresas, paneles),
    • presentaciones y rondas de libros,
    • libro-forum, coloquios, debates,
    • maletas viajeras,
    • guías de lectura (relacionar los fondos con las materias del currículo),
    • programas sobre temas, géneros,
    • visitas autores (escritores, ilustradores),
    • exposiciones,
  • Desde la escritura

    • juegos con el lenguaje (diccionarios fantásticos...),
    • la tradición oral y la poesía (recopilar-recrear-crear),
    • provocación de historias (individuales, colectivas, con cartas, binomios...),
    • dossieres, diarios,
    • revista escolar,
    • creación de libros (libros viajeros...)
     
  • Desde la oralidad

    • juegos fonéticos las palabras,
    • trabajo oral con el folklore infantil,
    • cantar,
    • recitar,
    • contar cuentos, historias y relatos,
  • Desde otras formas de expresión

    • la ilustración,
    • la historieta,
    • la fotografía
    • la fotografía
    • la publicidad
    • el cine,
    • el teatro, la música,
    • proyecciones, audiciones, espectáculos...